En la iluminación de la carretilla elevadora se deben tener en cuenta una serie de criterios y normativas que regulan el uso del equipamiento.
La tecnología de la iluminación en una carretilla elevadora ha seguido un proceso evolutivo importante, del mismo modo que en otras tecnologías distintas aplicadas al sector de la automoción. Hemos pasado de los halógenos hasta el LED, utilizando también el xenón, todo ello ha hecho que la potencia en lúmenes, rendimiento, vida útil y resistencia se haya incrementado.
La iluminación de la carretilla elevadora: de los halógenos al LED
En el montaje de la iluminación en una carretilla elevadora, la proyección y amplitud del foco de luz depende de la manera en que este se haya instalado. Por ello existe una altura óptima, la cual ha de ser mayor a 2,5 m, debe tener una inclinación entre 2° y 15°, en función del uso que se le aplique. Lo recomendable es establecer un campo de trabajo iluminado de 360°, de forma uniforme y en torno a la carretilla elevadora.
Las carretillas Toyota ofrecen en diferentes tipos de iluminación, están preparadas para aplicaciones diferentes. La iluminación de la carretilla elevadora puede ser de corto alcance, esta se puede centralizar frente a la carretilla, hasta una distancia de 30 m. Las carretillas Toyota cuentan con iluminación de corto alcance que se dispersa de forma homogénea. Esta forma de iluminación permite ver los alrededores de la carretilla elevadora, todos sus accesos y accesorios. La iluminación de largo alcance puede llegar hasta los 120 m y es más estrecha y larga.
La iluminación de la carretilla elevadora tiene entre otras características, la temperatura del color. Esta aumenta la percepción de los objetos, algunos fabricantes de carretillas elevadoras integran altas temperaturas del color para conseguir valores lumínicos altos, lo recomendable es usar una temperatura alrededor de los 5000° k.
Luces de la carretilla elevadora tienen temperatura, color y alcance
Otro de los factores que influyen en la iluminación de la carretilla elevadora es la distribución de la luz. La calidad de esta no está relacionada solo con el valor del lumen, también depende de la dispersión sobre el suelo, que ha de ser homogénea y de la concentración de la luz en un determinado foco de trabajo, además, esta luminosidad debe transferirse de forma suave a los lados. La forma en que se distribuya la luz está relacionada con el tipo de reflector del faro, este la dispersa en un ángulo concreto, conocido como reflector de parábola, pero también se dispersa de manera calculada, usando un reflector de formas libres.
Los faros de la carretilla elevadora usan luces potentes
Los faros de trabajo de la carretilla elevadora utilizan luces de alta intensidad, estos tienen un desarrollo térmico de hasta 120 °C. Para evitar las altas temperaturas, se usan disipadores de calor que utilizan sensores térmicos, de esa forma se protege el faro del sobrecalentamiento.
Las carretillas Toyota están preparadas con una electrónica segura que evitan interferencias en componentes electrónicos y diversos accesorios de la carretilla. Los faros de las carretillas elevadoras con carcasa de aluminio deben estar revestidas para impedir la corrosión. Además, los faros deben poseer resistencia al calor, vibraciones, frío y condiciones extremas. Se estima que la vida útil de un faro en una carretilla elevadora es un factor determinante a la hora de amortizar la inversión de estos aparatos. La duración media de las lámparas halógenas suele ser de 500 horas y 1000 horas para las lámparas de xenón, la tecnología LED tienen una duración superior de unas 60.000 horas.