Tal y como ya hemos mencionado en otros artículos, la conducción de las carretillas elevadoras de ocasión o de alquiler no es complicado pero si es necesario que se tomen una serie de precauciones para evitar vuelcos del vehículo. Y es que, debido a la carga y descarga de mercancía pesada, es probable que la carretilla elevadora pierda estabilidad durante los desplazamientos.
En este sentido, los operarios que hagan uso de las carretillas elevadoras de ocasión que hayamos comprado –o bien que hemos alquilado- deben conocer qué situaciones evitar durante la conducción y las maniobras ya que suponen un riesgo elevado de sufrir un vuelco frontal. Las principales causas son:
- Llevar la carga elevada con el mástil extendido o bien inclinado hacia adelante.
- Circular con sobrecarga en la carretilla elevadora y frenar en una superficie que no sea totalmente horizontal.
- Hacer maniobras de manera brusca. Por ejemplo, mientras avanzamos frenar de repente o cuando circulamos hacia atrás acelerar repentinamente.
- Por circular en suelos desiguales.
- Al chocar con un bordillo.
Estas son algunas de las situaciones que convienen evitar para conseguir realizar una conducción segura de tanto las carretillas de segunda mano como de alquiler. No obstante, si tenemos dudas y queremos ampliar la información podemos consultarlo con los profesionales del alquiler de carretillas elevadoras o bien con los profesores que imparten cursos de conducción de estos vehículos.
Medidas preventivas al circular con carretillas elevadoras de ocasión o de alquiler
Respecto a los vuelcos frontales, también conviene que sepamos cuáles son las medidas preventivas básicas. Estas son:
- Colocar de forma estable la carga.
- Nunca sobrecargar las carretillas elevadoras de ocasión, nuevas, de alquiler…
- No desplazarse por pendientes que excedan el 10% de desnivel.
- Evitar siempre maniobrar de forma repentina.
Si a pesar de todo esto se sufre un vuelco frontal lo importante es:
- No saltar nunca de la carretilla elevadora.
- Sujetarse con firmeza al volante y presionar nuestro cuerpo contra el asiento a la vez que apoyamos los pies contra el suelo.